Hace apenas una hora que he llegado de una pequeña ruta pirenaica, y aunque ha sido una escapada sin premeditar lo cierto es que he acabado pasando un día bastante entretenido. La intención era acercarme a Oloron St. Marie, con el fin de asistir esta noche a un concierto que me interesaba. Finalmente, he desistido del concierto por no arriesgarme a cruzar de nuevo el pirineo de madrugada, con el riesgo del hielo. Más que un relato, pretendo dejaros unas imágenes que son lo más valioso.
A eso de las ocho de la mañana, he dejado la gasolinera del Cid, dirigiéndome hacia Huesca, puerto de Monrepós, y posteriomente hacia Somport. Como no tenía muy claro el estado de los puertos, he decidido cruzar por el túnel para evitar sorpresas.
En torno a las 11:00h me plantaba en Oloron, aprovechando para dar un paseo por las calles. Para quien no conozca la ciudad, le dejo una foto junto a uno de los ríos que la atraviesan (creo que la Gave d'Aspe).
Después he ido a comer a la localidad próxima de Gan, donde hay un pequeño restaurante llamado Auberge Le Tucq, que puedo recomendar para quien sea amante de un potaje pirenaico de verduras llamado "garbure". Es un rinconcito muy acogedor, junto al río, que trasmite paz y sosiego.
Desde aquí me he dirigido a Pau, que está a tan solo unos diez kilómetros. Para quien conozca la ciudad poco se puede decir. Me he dado tres vueltas por el circuito urbano, en su recuerdo, puesto que no sabemos si se volverá a celebrar el Grand Prix Historique, y posteriomente he visitado una pequeña tienda de maquetas y librería del motor, donde se pueden encontrar libros maravillosos. Por si alguno tiene curiosidad, http://www.motors-mania.com" onclick="window.open(this.href);return false;" onclick="window.open(this.href);return false;. Como de costumbre, he salido con más peso del que desearía, aunque los ejemplares que me han acompañado de vuelta valen la pena. Dejo alguna foto del castillo, en segundo lugar, así como de la terraza del restaurante del casino y los alrededores, ubicado junto al Parque Beaumont. Pau es una villa con un encanto especial, con inspiración inglesa, y que recomiendo a todos para pasar un fin de semana.
Por lo demás, la vuelta, por el Col du Portalet, puesto que tras haber averiguado si estaba abierto, he decidido volver por el valle de Ossau. Acompañan unas fotos de las primeras nieves. La carretera, afortunadamente, muy limpia, y sin tráfico. Las imágenes lo dicen todo.
El resto, sin mayores dificultades. El baúl lleno con los libros así como las tortas de manzana de la panadería de Lanave, lugar de obligada visita. Y en cuanto a kilómetros, unos 520km, con lo que doy casi por terminado el rodaje del nuevo motor de la "cacereña". Dos meses decía alguno, y en apenas dos semanas ya la tengo a pleno rendimiento...
A eso de las ocho de la mañana, he dejado la gasolinera del Cid, dirigiéndome hacia Huesca, puerto de Monrepós, y posteriomente hacia Somport. Como no tenía muy claro el estado de los puertos, he decidido cruzar por el túnel para evitar sorpresas.
En torno a las 11:00h me plantaba en Oloron, aprovechando para dar un paseo por las calles. Para quien no conozca la ciudad, le dejo una foto junto a uno de los ríos que la atraviesan (creo que la Gave d'Aspe).
Después he ido a comer a la localidad próxima de Gan, donde hay un pequeño restaurante llamado Auberge Le Tucq, que puedo recomendar para quien sea amante de un potaje pirenaico de verduras llamado "garbure". Es un rinconcito muy acogedor, junto al río, que trasmite paz y sosiego.
Desde aquí me he dirigido a Pau, que está a tan solo unos diez kilómetros. Para quien conozca la ciudad poco se puede decir. Me he dado tres vueltas por el circuito urbano, en su recuerdo, puesto que no sabemos si se volverá a celebrar el Grand Prix Historique, y posteriomente he visitado una pequeña tienda de maquetas y librería del motor, donde se pueden encontrar libros maravillosos. Por si alguno tiene curiosidad, http://www.motors-mania.com" onclick="window.open(this.href);return false;" onclick="window.open(this.href);return false;. Como de costumbre, he salido con más peso del que desearía, aunque los ejemplares que me han acompañado de vuelta valen la pena. Dejo alguna foto del castillo, en segundo lugar, así como de la terraza del restaurante del casino y los alrededores, ubicado junto al Parque Beaumont. Pau es una villa con un encanto especial, con inspiración inglesa, y que recomiendo a todos para pasar un fin de semana.
Por lo demás, la vuelta, por el Col du Portalet, puesto que tras haber averiguado si estaba abierto, he decidido volver por el valle de Ossau. Acompañan unas fotos de las primeras nieves. La carretera, afortunadamente, muy limpia, y sin tráfico. Las imágenes lo dicen todo.
El resto, sin mayores dificultades. El baúl lleno con los libros así como las tortas de manzana de la panadería de Lanave, lugar de obligada visita. Y en cuanto a kilómetros, unos 520km, con lo que doy casi por terminado el rodaje del nuevo motor de la "cacereña". Dos meses decía alguno, y en apenas dos semanas ya la tengo a pleno rendimiento...